Como siempre hemos dicho, el diseño de packaging es una de las partes más importantes a la hora de vender un producto. No sólo lo decimos, sino que además está respaldado con investigaciones y hechos. Y desde PuroMarketing nos vuelven a dar la razón. Es cierto que la belleza está en el interior, pero en el caso de los productos está claro que deben entrar primero por la vista. Esto es un aspecto vital a la hora de crear el packaging: hay que hacer que aquello que destaquemos del producto entre por la vista del consumidor y se decante por nuestro producto ante cualquier otro.
Debido a esto, la neurociencia juega un papel importante a la hora de diseñar un packaging, y ya incluso se habla de neurodiseño. El neurodiseño partiría de los últimos avances en neurociencia aplicándolos en el diseño, de esta manera el diseño sería más eficiente y concentrado en algún elemento en concreto. Pero está claro que antes se debería entender cómo funciona el cerebro del consumidor ante un producto para crear un contacto directo con el propio consumidor y que el hecho de comprar se convierta en una experiencia.
De este modo, la neurociencia ya ha apuntado algunos elemento a tener en cuenta para las empresas cuando estas trabajen sobre el packaging. Se trata de los siguientes:
El más sorprendente es que el buen packaging, el que realmente funciona, tiene en cuenta el olor, tacto, color o sonido a la hora de crear el diseño.
Usar todos esos elementos crea una experiencia multisensorial, que si falla puede perjudicar al producto: hay estudios que respaldan que si el paquete es de un color feo, el consumidor percibirá un peor sabor del producto que contiene.
La tipografía y el color llegan a influir en un 90% de nuestra decisión de compra, ya que otorgamos significados y valores de marca a los distintos colores y tipos de letra usados.
Los casos de éxito se corresponden con diseños o elementos que partieron de estos estudios y se aplicaron en el packaging. Por ejemplo, en los productos para mascotas se tiró de carga emocional porque la relación de la sociedad con las mascotas es cada vez más cariñosa.